Exhumación de Valdenoceda

Una Voluntaria-Valdenoceda, Laura, ha localizado a la familia de JOAQUÍN BRAVO LUCENA.

Éste fue el relato del reencuentro:

«Ayer por la tarde hablé con la hija de Joaquín, que me dijo que su padre opositó al cuerpo de guardias de asalto y aprobó los exámenes en Madrid. De ahí le trasladaron a Sevilla, ya casado con Benita. En Sevilla tuvieron un hijo que falleció al poco tiempo de nacer. Joaquín y Benita regresaron a Madrid y allí permanecieron durante la guerra. En Madrid tuvieron a sus hijos José y Marina, que nacieron en 1932 y 1935 respectivamente. Joaquín alcanzó el grado de teniente.

El único recuerdo que conserva esta mujer de su padre es el día en que le visitó en la cárcel en Madrid, donde estaba detenido. Era el «Día de la Merced», patrona de los presos. Un señor muy alto (su padre) la cogió en brazos y pasó toda la tarde con ella. No estaba permitido el contacto físico entre las mujeres y los presos, quienes debían mantener en todo momento una distancia de 5 metros.

La hija de Joaquín todavía guarda las cartas de su padre a su madre. Pero hace mucho que no las lee, porque se echa a llorar. Al parecer, su madre recibió por carta la noticia de la muerte de su marido en Valdenoceda una semana después de fallecer Joaquín».

Hoy, la hija de Joaquín sabe dónde está su padre y quiere colaborar para determinar cuáles son sus restos. Se hará la prueba de ADN, para intentar la identificación y recuperarle. Trabajaremos para hacerlo realidad.