28 de marzo de 2015.-
ANTONIO BERENGUER TRIGO era natural y residente en Cartagena (Murcia), en donde casó y donde dejó mujer y tres hijos en el momento de su muerte en el antiguo penal de Valdenoceda. Antonio murió de hambre el 28 de marzo de 1941, hace hoy 74 años. Sus restos serán entregados a su nieto el próximo día 18 de abril, en Valdenoceda. Precisamente su nieto, Agustín, ha escrito esta carta en memoria de su abuelo y de todos los que «perdieron la vida por culpa de los sentimientos más miserables del ser humano».
«Se cumplen hoy 74 años de la muerte de mi abuelo Antonio. Muerte provocada, muerte inducida, muerte vergonzante…
Mi abuelo trabajaba y vivía en Cartagena. Allí tenía su familia, sus amigos y su trabajo. Detenido por “auxilio a la rebelión” fue juzgado por un Tribunal Militar mediante un Consejo de Guerra celebrado sin las más mínimas garantías procesales. Fue condenado a 30 años de prisión por defender ideas contrarias al régimen rebelde según denuncia formulada por adeptos al mismo.
Tras el juicio, fue conducido en un primer momento al penal de Chinchilla (Albacete) para posteriormente ser enviado al campo de concentración de Valdenoceda, donde falleció sin poder volver a su esposa y a sus tres hijos.
Que su muerte y la de todos los que la perdieron por culpa de los sentimientos más miserables del ser humano nos sirvan de ejemplo y que por ellos perdonemos pero nunca olvidemos. Descansa en paz abuelo».