1 de abril de 2015.-
Hace un mes y medio anunciábamos en nuestra web, coincidiendo con el 72 aniversario de su muerte, la búsqueda de los familiares descendientes de MIGUEL PEÑA ORTIZ, Esta búsqueda la realizamos también, como hacemos siempre, en Facebook, en Google+ y en Twitter. Este fin de semana, un abuelo, Juan, y su nieto Angel tenían una reunión familiar. El nieto preguntaba al abuelo qué había sido de su padre. Juan, de 77 años, apenas recordaba qué le habían contado sobre la desaparición de su padre. Angel, el nieto, le ofreció buscar en internet. Pusieron MIGUEL PEÑA ORTIZ en Google y…..
….. a la primera.
MIGUEL PEÑA ORTIZ, natural de Cazorla (Jaén), estaba casado con Nicolasa García Rodríguez, Tenía 4 hijos y 3 hijas. Miguel murió en la cárcel de Valdenoceda el 14 de febrero de 1943.
Juan es el hijo de Miguel Peña Ortiz. Angel es el nieto de Juan y bisnieto de Miguel. Los dos sintieron que les daba un vuelco el corazón. De repente, dieron con el lugar en el que el padre de Juan y bisabuelo de Angel estaba enterrado. Y no sólo eso: empezaron a leer y se dieron cuenta que quizás esté exhumado y que les estábamos buscando para intentar identificar los restos de Miguel Peña.
Angel se puso en contacto con nosotros por Facebook. Éste es el mensaje que nos dejó:
Hola, en una de sus publicaciones decían que se han encontrado los restos de Miguel Peña Ortiz. Él es el padre de mi abuelo, Juan Peña Garcia. Les dijeron que había muerto, les entregaron sus pertenencias pero jamás supieron nada de su cuerpo. Hoy buscando si aparecía en alguna lista de muertos en tiempo de guerra, nos hemos encontrado con esto sin esperarlo. Espero pronto su respuesta. Muchas gracias.
Por supuesto, el domingo nos pusimos en contacto con Angel. Le explicamos cuál es el proceso para intentar la identificación de su bisabuelo y nos pusimos a su disposición para aportarles toda la documentación que tenemos sobre su bisabuelo y padre de Juan.
Juan, el hijo pequeño de Miguel Peña Ortiz, que tenía 5 años cuando su padre murió en Valdenoceda, ya sabe hoy dónde está su padre y, lo que es más importante para él, sabe que existe una posibilidad, aunque sea remota, de recuperar sus restos y enterrarlos con Nicolasa, su madre.
Enhorabuena, familia. Sois bienvenidos en esta pequeña Comunidad que estamos construyendo. Un fortísimo abrazo.